El número de vocablos nuevos y su aprendizaje no prosigue de forma igual a las etapas anteriores. En general, no nos exponemos a las palabras nuevas. No así un niño con cinco o seis años
Quizá estas personas se escandalizan menos cuando oyen esta palabra ( gásfiter ), que a lo mejor hasta les resulta “exótica”, a cuando escuchan en su propia tierra la palabra “fontaneru”.