El Real Racing Club de Santander ha negado su intención de "interferir" en la labor de Aritz Solabarrieta como entrenador, ha puesto en duda la "ética" del mismo por "descontextualizar" una conversación "informal" y cree que el objetivo es "desviar la atención" por sus resultados "insuficientes" al frente del banquillo verdiblanco.
Así se ha pronunciado el club en un comunicado, en relación a las manifestaciones realizadas por el entrenador del equipo, Aritz Solabarrieta, en la rueda de prensa posterior al encuentro entre el Racing y el Club Deportivo Ebro, en las que, según el club, "acusaba al vicepresidente del club de imponerle a su llegada cuestiones propias de su competencia, tales como alineaciones y forma de juego".
La entidad verdiblanca ha negado que tal hecho tuviera lugar con la intención de "interferir" en su labor como entrenador y ha puesto en duda la "catadura ética" de Solabarrieta por "descontextualizar" una conversación producida dentro de un "ámbito informal".
Asimismo, ha cuestionado que, si tales afirmaciones fueran ciertas, por qué no las puso de manifiesto o presentó su renuncia al cargo en ese momento, ante esa supuesta "injerencia" en el desarrollo de su labor profesional. De esta forma, el club considera que las declaraciones pueden tener como objetivo "desviar la atención sobre sus números al frente del banquillo del Racing" que, según ha subrayado, han resultado "insuficientes" para obtener la clasificación para el 'play off' de ascenso a Segunda, con siete derrotas en 19 partidos.
Finalmente, ha lamentado tener que "aclarar" las declaraciones de Solabarrieta en "un día triste", en el que acaba de concluir una temporada "decepcionante" para el racinguismo, que aspiraba a "cotas mayores" al inicio del curso.
