La Asociación de Peñas Racinguistas y la Gradona de los Malditos se han quejado del trato que recibieron ayer, sábado, por parte del Club Deportivo Mirandés los aficionados del Racing desplazados para presenciar el encuentro entre ambos equipos en el estadio de Anduva (1-1).
En un comunicado, han aclarado que la denuncia va dirigida a los encargados de gestionar el club, no a sus aficionados ni a la ciudad de Miranda de Ebro, que, según han reconocido, acogieron a los racinguistas "con extrema amabilidad durante la previa del encuentro".
Han relatado que la jornada en Miranda de Ebro transcurrió "de manera festiva y sin incidentes" hasta que, según han relatado, la afición verdiblanca tuvo que acceder al Estadio de Anduva, momento en el que, según han señalado, "se desató el caos".
Se han quejado de que solo había una "única puerta" habilitada para los visitantes y han denunciado que la "incompetencia" del CD Mirandés provocó que "la mayoría" de los aficionados verdiblandos no pudieran acceder al encuentro hasta que éste ya había comenzando (señalan que algunos entraron casi mediada la primera parte y ello pese a llevar en la cola una hora antes del inicio del partido).
En este sentido, también han denunciado la "pasiva actuación" de los responsables del Racing en Anduva ya que, según han dicho, tanto el jefe de seguridad como el director de Relaciones Institucionales, "estando al tanto de la situación, ni siquiera se molestaron en presentarse en la zona para interesarse por sus aficionados" o presionar para que el encuentro no empezara hasta que hubieran entrado.
Además, han añadido que el "ninguneo" hacia la afición racinguista por parte del CD Mirandés "no se limitó solo al acceso al campo, sino que continuó durante el encuentro, "con numerosos problemas de seguridad", y también a la salida del encuentro.
La APR y la Gradona de los Malditos se ha mostrado sorprendidos de que en Anduva haya una grada "provisional" durante tantos años para acoger a las aficiones visitantes (con una capacidad de unas 1.100 personas) en unas condiciones que, a su juicio, "no son adecuadas para un encuentro de La Liga".
Además, han señalado que, durante la salida del estadio, se trató a los menores de edad de la afición de Racing de forma "vergonzosa" y "como si fueran peligrosos terroristas".
