Hay que ser un ignorante de estas cosas que sucedieron en este siglo para ejecutar la maldita gracia de emplear el retruécano en dar vivas a una banda cruel y sangrienta como ETA.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no encuentra el D.N.I. entre sus pertenencias para poder votar, por lo que ha tenido que abandonar el colegio electoral y volver a casa para buscarlo.