Desde 45 euros hasta los 20.000 euros. Esa es la horquilla en la que se mueve el valor de algunas pesetas, según el estado de conservación en el que se encuentren. Y puede que esas monedas se encuentren en alguno de los hogares de España, pues según los datos manejados por el Banco de España, en agosto de 2019 los españoles todavía conservaban 136.602 millones de pesetas en billetes y 131.777 millones de pesetas en monedas.
El plazo para cambiar los billetes y monedas de pesetas finalizaba este 31 de diciembre, pero fue ampliado hasta el 30 de junio de 2021 por la pandemia.
Las pesetas ‘más caras’, de menor a mayor valor, son:
Peseta 1987 E-87: los coleccionistas pagan unos 45 euros por esta moneda. Fue acuñada con motivo de la III Exposición Nacional de Numismástica.
100 pesetas de 1983: hasta 55 euros por cada una.
50 pesetas de 1984: su valor alcanza los 60-70 euros.
25 pesetas de 1995: todos la conocemos como la moneda con el agujero en el centro. ¿Su valor? Hasta 100 euros.
100 pesetas de 1966: hay varias variantes de esta moneda de plata. Una de 1969 puede llegar a valer unos 145 euros, pero una variante de este año puede venderse por 400 euros.
5 pesetas de 1975: la que tiene el reverso del Mundial ’82 puede valer entre los 350 y 400 euros.
50 céntimos de 1949 E-51: estas monedas se dejaron de acuñar en 1965 y también cuentan con un agujero en el centro. Pueden venderse por 500 euros.
1 peseta de 1947: unos 1.400 euros. Se conocieron popularmente como ‘Rubias’.
2,5 pesetas de 1953: Se pueden vender por 1.700 euros, siempre dependiendo de su estado de conservación, debido a lo complicado que es conseguir una.
5 pesetas de 1949: cualquier coleccionista puede pagar desde los 12.000 euros hasta los 20.000 euros.
