El consejero de Sanidad, Raúl Pesquera, ha indicado que solo nueve de los 126 consultorios médicos que hay en Cantabria no han reabierto después de su cierre por la pandemia del Covid-19: los de Corvera de Toranzo, Esles, Zurita, Viveda, Ubiarco, Mijares, Santa Olalla, Correpoco y Riaño. Además, está previsto reabrir este último "en breve", según ha avanzado Pesquera en el Pleno del Parlamento de este lunes, en el que ha respondido a preguntas formuladas por el PP en torno al funcionamiento de los consultorios.
Según el consejero, algunos consultorios no han entrado de nuevo en funcionamiento porque están "en malas condiciones" y su puesta a punto corresponde a los ayuntamientos, mientras que la Consejería aporta el mobiliario y los profesionales. Asimismo, ha asegurado que todos los que sí están abiertos disponen de médico y enfermero, y que la apuesta de su departamento es mantener todos ellos. "De ninguna manera tenemos en mente cerrarlos, cosa que ustedes en otras comunidades sí que lo tienen claro", ha reprochado Pesquera a los 'populares' ante sus críticas en torno a las deficiencias asistenciales en estos centros sanitarios.
Y es que el diputado del PP, César Pascual, ha remarcado que el hecho de que un médico o enfermero pase "una vez cada 15 o 20 días" por un consultorio rural "no es tenerlo abierto y en pleno funcionamiento", por lo que ha apuntado que existirían estas deficiencias en una veintena de ellos.
Además, Pascual ha preguntado a Pesquera cuáles son esos consultorios que estarían en "malas condiciones" que impiden su apertura, ya que está seguro de que los alcaldes son "los primeros interesados" en invertir para poder dar este servicio a sus vecinos. El titular de Sanidad no ha respondido cuáles son esos centros, pero ha asegurado que su departamento "apuesta por la medicina rural" y que los consultorios "forman parte de esta Consejería", en la que "no recortamos", ha destacado, acusando al PP de haberlo hecho cuando ha gobernado.
MINA DE REOCÍN
Estas preguntas al consejero de Sanidad han sido el último punto del orden del día del Pleno, que ha arrancado a las 16:00 horas con el debate de una moción también del PP sobre la mina de Reocín, que no ha salido adelante al contar con el rechazo de PRC y PSOE, ya que pedía que el Parlamento condenara la utilización "política y electoral" que el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, y su partido, hicieron antes de las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2019 sobre la posible explotación de zinc.
Además, en un segundo punto la iniciativa instaba a la Consejería de Medio Ambiente a desbloquear antes de dos meses todos los expedientes que tramita la Dirección General de Minas para obtener permisos para algunos proyectos. Unas autorizaciones que, según el diputado popular que ha defendido la moción, Roberto Media, llevan paralizados 43 meses, cuando antes de la campaña electoral unos trámites similares se hicieron en "unas semanas".
Todos los grupos de la oposición, PP, Ciudadanos (Cs) y Vox han apoyado la moción ya que opinan que el anuncio de la posible apertura de la mina que hizo Revilla avanzando que una empresa iba a invertir 400 millones de euros y que se iban a crear 2.000 puestos de trabajo no era más que un "engaño" que "se ha ido diluyendo hasta quedarnos en unas tristes catas" en el terreno para comprobar si hay mineral.
Frente a ello, PRC y PSOE han asegurado que el proyecto "sigue vivo", aunque avanza más lento de lo que se esperaba, y que el Gobierno únicamente ha venido haciendo "todo lo posible" administrativamente para que la empresa australiana Variscan Mines pueda cumplir sus expectativas de explotación, todo ello "a coste cero" para la administración. "La labor del Gobierno es la de abonar el terreno para que estos proyectos puedan florecer", ha resumido el diputado regionalista y alcalde de Reocín, Pablo Diestro.
