POLÍTICA

El nuevo equipo de Gobierno de Voto “elimina gastos superfluos” con una liberación menos y una reducción de 50.000 euros en sueldos

Pleno de Voto en el que se aprobó la moción de censura y se produjo el cambio de gobierno
Pleno de Voto en el que se aprobó la moción de censura y se produjo el cambio de gobierno

El nuevo equipo de Gobierno de Voto, conformado por el PRC y la Agrupación Vecinal, ha renunciado a una de las liberaciones con las que contaba hasta ahora el Partido Popular -que ostentaba la Alcaldía hasta este lunes, en que fue desalojado por una moción de censura impulsada por ambas formaciones- y ha decidido reducir alrededor de un 5% el sueldo del alcalde y la primera teniente de alcalde, con un ahorro de 50.000 euros, lo que representa un 3% del presupuesto municipal. Así lo han anunciado este martes el alcalde, el independiente Francisco Maza, y la teniente de alcalde regionalista, Natalia Sánchez, quienes han querido que su primera decisión al frente del Ayuntamiento sea este recorte en las remuneraciones como exponente de "la austeridad y la racionalización del gasto público que a partir de ahora serán la norma en el Ayuntamiento", frente a "la alegría en el gasto y los excesos" de la etapa anterior, ha indicado el PRC en un comunicado.

De hecho, el control del gasto ha sido una de las razones de la moción de censura presentada por ambas formaciones y que ha supuesto el relevo del popular Santiago del Campo por Francisco Maza, que ocupará la Alcaldía durante el próximo año y medio antes de darle el relevo en la última etapa de la legislatura a la regionalista Natalia Sánchez.

El acuerdo de gobierno entre el PRC y AVV tiene como objetivo prioritario acabar con "el preocupante deterioro y el estancamiento" que la gestión del PP ha provocado en el municipio, por su "falta de iniciativa política y la ausencia total de inversiones y proyectos, que estaban provocando una paulatina pérdida de peso político en Voto desde que comenzó la legislatura".

Por ello y frente al gobierno "unilateral del grupo minoritario que hasta ahora detentaba la Alcaldía", el nuevo equipo ha comprometido "un cambio de rumbo para normalizar el funcionamiento de la Administración local y gobernar con solvencia y decisión en beneficio de los vecinos".

La estabilidad política y el desarrollo de las políticas incluidas en sus respectivos programas electorales serán los ejes de la acción de gobierno, junto con la racionalización del gasto y la "eliminación de gastos superfluos para potenciar las partidas destinadas a apoyar las necesidades de los vecinos y la mejora de los servicios municipales". La nueva Junta de Gobierno estará integrada por dos concejales del PRC y otros dos de AVV. Las dos formaciones se repartirán también la representación del municipio en los organismos extra-municipales, con la excepción de la Federación de Municipios, en la que el representante será el alcalde.

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