Cerca de 5.000 gallinas fallecieron una granja de San Felices de Buelna, el pasado domingo, asfixiadas por la temperatura récord que alcanzó la localidad (42,9 grados). El propietario, J.F.P., que se encontraba fuera del municipio con su familia, asegura que el gallinero goza de un sofisticado sistema de refrigeración, pero que las altas temperaturas nunca se habían presenciado en el pueblo.
Ante la delicada situación; amigos, familiares, empleados y vecinos de San Felices no dudaron en ayudar al granjero a retirar los animales debido a que, a causa del calor extremo, las aves producían malos olores en el gallinero. El propietario, quien afirmaba que los animales habían estado cantando hasta hace dos días, con una temperatura de 31 grados, valora una pérdida de 25.000 euros con la muerte de las gallinas, ya que cada una de ellas tiene un precio cinco euros.
El granjero mantendrá las 12.500 gallinas que le han quedado después de haber perdido 5.000 ya que, según ha explicado, en estos momentos no tiene capacidad para reponerlas porque supondría un riesgo de compatibilidad juntar gallinas jóvenes con adultas por posibles contagios.
San Felices de Buelna ha registrado una cifra récord de temperatura en una ola de calor que asola toda la región. En concreto, se llegó a 43 grados en Terán de Cabuérniga y Tama. Y no fueron los únicos: Ramales de la Victoria (42,4), Bárcena Mayor (42,2) o Villacarriedo (42,1) también registraron, durante la tarde del domingo, máximas que superaron los 42 grados.
