viernes. 29.03.2024

Un error en el diagnóstico de una dolencia ha terminado con la extirpación de un testículo a un joven de 15 años y una indemnización por parte del hospital de 52.700 euros. La reclamación de daños y perjuicios de la familia señala que el menor, natural de Bilbao, acudió al hospital Sant Pau i Tecla de Tarragona cuando se encontraba de vacaciones en marzo de 2016. Un dolor en el testículo derecho le provocaba mareo y vómitos.

Sin embargo, la única prueba a la que se le sometió fue una exploración física, según recoge El Correo. El tratamiento consistió en un antiinflamatorio analgésico. Cuando remitió el dolor, le dieron el alta prescribiéndole antibióticos e indicándole que acudiera a su médico de cabecera pasados diez días.

El dolor, sin embargo, no remitió, y el médico de familia le derivó a las Urgencias del hospital de Basurto. Fue allí, tras realizarle pruebas y ecografías, donde se comprobó que tenía una “isquemia evolucionada”, y que tenía además “cierta antigüedad”. “La única opción era la extirpación y colocación de una prótesis”, señala la familia en su escrito.

Para los familiares, según recoge el citado medio, “la falta de pruebas diagnósticas más allá de la exploración impidió conseguir un diagnóstico de la real dolencia, permitiendo que la enfermedad se desarrollase hasta la pérdida del testículo”. Asimismo, concluye que “el error de diagnóstico es la causa de perder cualquier oportunidad de salvar el testículo mediante una cirugía precoz”. En la reclamación se valoraba la pérdida del testículo en 100.000 euros.

52.700 euros de indemnización por extirparle un testículo por un error de diagnóstico