La Junta de Personal Docente de Cantabria, integrada por los sindicatos STEC, ANPE, TU, CCOO, UGT y CSIF, se ha mostrado contraria a la "privatización" de los equipos de orientación psicopedagógica y a la reducción del cupo propuesto por la Consejería de Educación de once profesores con respecto al curso pasado. La Junta ha denunciado que lo que la consejera de Educación, Marina Lombó, anunció "como un beneficio que iba a liberar de carga de trabajo a los equipos de orientación y que supondría un refuerzo en la red pública, ya que iba a contar con más recursos, se ha traducido en un tijeretazo en toda regla".
Los sindicatos han indicado que el cupo propuesto contempla la reducción de once docentes respecto del curso pasado, que se corresponden con 5,5 plazas de la especialidad de Orientación Educativa (1,5 plazas en el Equipo General de Camargo, una en el de Laredo, 2,5 en el de Santander y 0,5 en el de Torrelavega) y de 3,5 plazas de la especialidad de Servicios a la Comunidad (una plaza en el Equipo General de Camargo, una en Laredo, 0,5 en Reinosa y una en Santander).
Ante esta propuesta, la Junta ha solicitado una reunión con la consejera y a los directores generales responsables, que se celebrará el próximo viernes, para que den "las explicaciones oportunas sobre este cambio de modelo que supone una merma de once profesionales respecto del curso anterior". La Junta de Personal solicitará de nuevo que se mejoren los servicios de atención a la diversidad, aumentando tanto los recursos materiales como las plantillas de estos equipos de orientación psicopedagógica; e insistirá a la consejera en que "recapacite sobre esta decisión en la búsqueda de mantener unos servicios públicos de calidad".
