La céntrica calle Isabel II de Santander, por la discurre una parte importante del tráfico de acceso al centro de la ciudad, se va a someter a una renovación integral en la que el Ayuntamiento invertirá casi 1,5 millones de euros para darle "una cara más amable", principalmente a través del ensanchamiento de las aceras y su dotación con zonas verdes algo que será posible al reducirse los carriles de circulación de los tres existentes a dos.
Esta reducción de carriles no se realiza con el objetivo de ensanchar las aceras sino porque actualmente no tienen un ancho suficiente, ya que son de poco más de 2,5 metros de ancho cuando lo normal es que cada carril tenga entre tres y 3,20 metros, según han explicado la alcaldesa, Gema Igual, y el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz.
Ambos han presentado hoy en rueda de prensa el proyecto de renovación de la calle Isabel II, que se ha aprobado esta semana en la Junta de Gobierno Local y para el que se van a iniciar los trámites de licitación con un presupuesto de 1.425.600 euros y un plazo de ejecución de nueve meses.
Desde el equipo de Gobierno esperan que las obras puedan comenzar después del verano y, aunque estas incluirán la renovación de los servicios de saneamiento y alcantarillado, confían en que no haya que cortar al tráfico la calle durante los trabajos. "No será necesario el corte total de la circulación", ha afirmado Díaz.
Tanto la alcaldesa como el concejal han considerado que la calle Isabel II "pedía a gritos" una renovación ya que es la única de las calles principales del centro y su entorno en la que no se ha hecho nada y además supondrá mejorar una zona comercial y peatonal.
La renovación se ejecutará desde la intersección de la calle Isabel II con la calle Castilla hasta su confluencia con Calvo Sotelo, tramo en el que también se harán trabajos en zonas de las calles Méndez Núñez y Cádiz.
También se actuará en el último tramo de Isabel II, a la altura del Mercado de La Esperanza, donde se aprovechará para renovar la calle La Paz y su confluencia con Francisco de Quevedo con un tratamiento semipeatonal ya que ahí se ubicará el nuevo edificio administrativo del Ayuntamiento.
La alcaldesa ha resumido que esta renovación de Isabel II dotará a la calle de "aceras más anchas, zonas verdes y arbolado y más iluminación", y se pasará de tres a dos carriles porque "los actuales son realmente justos".
"Se va a renovar el pavimento de las aceras con losas de granito, se renovará la capa de rodadura de la calzada, se van a mejorar las redes de saneamiento y alcantarillado, se soterrará los tendidos aéreos, se colocarán hidrantes, papeleras y bancos", ha dicho.
Igual ha señalado que la actuación está consensuada con los comerciantes de la calle
DETALLES DEL PROYECTO
El concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda ha sido el encargado de explicar los detalles del proyecto, del que ha destacado la reducción de tres a dos carriles para que tenga el ancho suficiente de tres metros o más del que ahora carecen, lo que provoca problemas principalmente en el acceso de autobuses y camiones a la zona de las Estaciones.
Díaz ha estudiado y la calle puede "funcionar perfectamente bien" con esa reducción de un carril, pasando la calzada de ocho a 6,40 metros. "Creemos que va a funcionar correctamente", ha señalado.
El edil ha explicado las actuaciones en la calle comenzando por el tramo de Isabel II y sus intersecciones con la calle Castilla y Calderón de la Barca, donde se actuará en la acera de la margen izquierda donde se encuentran los edificios en la que se renovará el pavimento.
Desde la intersección con Calderón de la Barca hasta la de Emilio Pino, se ensancharán las aceras y, entre éstas y la calzada, se introducirá un parterre longitudinal con plantas y arbustos, así como algún árbol, separando el tráfico de los comercios. Además, se alternarán con los árboles farolas que se sumarán a la iluminación ya existente en las fachadas.
A partir de Emilio Pino, al estar la parada de taxis, se mantendrá está y se "hará una transición" en la calzada para tener la parada y los dos carriles. Y, para que los taxis no tenga problemas para incorporarse al tráfico, principalmente al carril derecho en dirección al Paseo de Pereda, se colocará un semáforo.
Se aprovechará también la actuación para "rematar" los tramos de las calles Méndez Núñez y Cádiz entre Isabel II y Lealtad, donde solo se renovará el pavimento de las aceras y la calzada.
Ya en la zona del Ayuntamiento, y pasada la confluencia de Isabel II con Juan de Herrera que se renovó cuando ésta última se peatonalizó, se actuará en Francisco de Quevedo y la calle La Paz, que se renovarán con un tratamiento semipeatonal para resaltar el futuro edificio administrativo municipal, se reubicarán las plazas de aparcamiento de motos y se mantendrá la parada de taxis.
Junto al Mercado de La Esperanza, se renovarán las dos aceras, la que está junto a los edificio no se ampliará pero sí la que está junto al mercado, donde también se reordenará el aparcamiento de carga y descarga.
Igual ha señalado que la actuación está consensuada con los comerciantes de la calle, con quienes el equipo de Gobierno se ha reunido en varias ocasiones y volverá a hacerlo en cuando se adjudiquen las obras para, junto a ellos y la empresa, planificar las obras para que éstas causen la menor afección a los negocios porque "pillará la campaña de navidad".
El compromiso es que las obras de Cervantes duren tres meses
OBRAS DE CERVANTES COMENZARÁN EN SEPTIEMBRE
La alcaldesa ha destacado que, con esta actuación, el Consistorio sigue mejorando zonas comerciales de la ciudad como también hará "en breve" con la calle Cervantes. A preguntas de la prensa sobre el inicio de este proyecto, el concejal de Urbanismo ha indicado que el Ayuntamiento se ha comprometido a que la obras de Cervantes comiencen sobre el 1 de septiembre "como fecha de referencia".
Y es que, ha destacado Díaz, el compromiso es que las obras de Cervantes duren tres meses y estén concluidas antes del Puente de la Constitución. De esta forma, es probable que en algún momento coincidan las obras de Cervantes con las de Isabel II y, preguntado por las afecciones de ello al tráfico, el edil ha indicado que "no tiene nada ver porque el tráfico de Cervantes es del salida de la ciudad y el de Isabel II de entrada"
Pero el Ayuntamiento tiene previsto organizar las obras de esta última calle para que sean compatibles con el tráfico y, ante las situaciones que "sabemos que se van a generar" al cortar Cervantes, Díaz ha señalado que en Isabel II en los primeros meses, que es cuando coincidirán con las obras de Cervantes, "probablemente no llevemos a cabo ninguna actuación que desde el punto de vista del tráfico contribuya a aumentar las afecciones que ya esté generando Cervantes".
