jueves. 28.03.2024

La Guardia Civil ha detenido a 40 personas en el marco de la operación 'Sargazos' desarrollada contra la pesca furtiva de la angula durante los meses de enero a marzo y ha puesto a disposición judicial en calidad de investigadas a otras seis, como presuntas autoras de delitos contra la flora, fauna y animales domésticos, al realizar la pesca de esta especie en lugares expresamente prohibidos.

Asimismo, se han formulado 30 denuncias administrativas principalmente por pescar sin licencia, que han sido remitidas a Delegación del Gobierno y Consejería de Medio Rural, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria, respectivamente.

Durante la operación se han recuperado y devuelto al medio acuático casi 8.300 gramos de angulas, además de las que algunos de los detenidos arrojaban al agua ante la presencia de los agentes. Y se han incautado 65 utensilios (cedazos y calderos) utilizados para la pesca, teléfonos móviles y transmisores, cañas de pescar, dos vehículos y una embarcación.

Los pescadores furtivos, además de los medios utilizados, habían establecido una red de comunicación para evitar ser detectados por las fuerzas de seguridad

Según ha informado este viernes la Guardia Civil en un comunicado, tras detectar la pesca furtiva de angula en Cantabria se realizaron vigilancias en la línea costera, en diferentes puntos de subida de las angulas del medio marino hacia las aguas interiores (donde van a completar su desarrollo evolutivo hasta adultos de anguila), con el fin de localizar a quienes pudieran estar pescando en estas zonas de las playas, ya que estarían incumpliendo la normativa penal.

Esta actuación ha sido complicada puesto que los agentes tenían que llevarla a cabo de madrugada, en días con condiciones atmosféricas y de la mar adversas, al ser los momentos idóneos para la pesca de esta especie.

40 pescadores profesionales autorizados

La Dirección General de Pesca del Gobierno de Cantabria autorizó exclusivamente a 40 pescadores profesionales la pesca de la angula en cinco zonas concretas, para conseguir llevar un control de esta práctica pesquera y así no perjudicar a la especie y cuantificar la cantidad pescada ya que, a diferencia de otras especies donde se pescan ejemplares adultos, en este caso se realiza sobre el alevín de la anguila y una pesca desmedida podría afectar en el total de ejemplares que llegarían a ser adultos.

Con esta información y la conseguida en la fase de vigilancia, los agentes del SEPRONA intensificaron sus actuaciones en las playas de Loredo, Tengandín (Noja), rías de Campiazo, Limpias, Treto, San Juan de la Canal y río Pas, donde finalmente se realizaron el grueso de las intervenciones, principalmente en las playas de Noja y Loredo, con 25 intervenciones.

Se detectó que los pescadores furtivos, además de los medios utilizados -normalmente vadeadores, trajes de neopreno, linternas, cubos, cedazos y vehículos escondidos-, habían establecido una red de comunicación para evitar ser detectados por las fuerzas de seguridad. Así, había vigías que alertaban a los que se encontraban pescando por teléfono, por equipos de transmisión o simplemente con la señal convenida (silbidos y gritos).

De esta manera, para la Guardia Civil queda patente el reparto de funciones durante la pesca ilegal, lo que denota cierta organización delictiva en personas que habían sido sorprendidas en más de una ocasión, seis de ellas, detenidas dos veces.

En algunos casos en los que eran descubiertos pescando de forma ilegal llegaron a simular que estaban realizando estiramientos para la práctica del footing a altas horas de la madrugada, con el fin de que los agentes no los detuvieran.

En otras ocasiones, y ante la menor duda de la presencia policial, dejaban de pescar para dar a entender que realizaban otras prácticas legales como la pesca con caña, o se deshacían de los objetos utilizados durante la pesca y las capturas de angulas realizadas.

Detenidas 40 personas por pesca ilegal de angulas en Cantabria
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