En 2017 los bomberos tuvieron que desalojar el edificio número 57 de la calle del Sol de Santander debido a que en su fachada aparecieron numerosas grietas que ponían en peligro la estructura del edificio.
El 17 de julio de 2017 se derrumbó la fachada del edificio que da a la calle Casimiro Saiz sin que nadie resultase herido
El 17 de julio de 2017 se derrumbó la fachada del edificio que da a la calle Casimiro Sainz sin que nadie resultase herido, aunque solo unos minutos antes un bombero había accedido al interior del mismo con una vecina para retirar algunas de sus pertenencias. Cuatro años después del colapso parcial del edificio de la calle del Sol, los vecinos siguen sin volver a sus pisos y el punto de origen del colapso sigue ahí, tapiado.
Las grietas que dieron lugar al derrumbe fueron ocasionadas por una obra menor que se estaba llevando a cabo en uno de los locales de la parte inferior del bloque de pisos.
