Abril ha sido el cuarto más seco y el séptimo más caluroso en 62 años en Cantabria, según el avance de la Delegación Territorial en Cantabria de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
La temperatura media regional de abril se situó en 11,6 grados centígrados, 1,5 grados por encima del valor medio climatológico del periodo 1991-2020. Ha sido el séptimo abril más caluroso del periodo 1961-2023, y el cuarto más caluroso desde 2000.
Además, abril resultó muy seco, con 44 litros por metro cuadrado de precipitación recogida en promedio regional. Esta cantidad es el 42% del valor esperado para este mes en el periodo 1991-2020, y se sitúa como el cuarto más seco del periodo 1961-2023.
Abril continúa la serie de meses muy secos que se inició en febrero de este año. La precipitación acumulada en el año hidrológico en curso -desde octubre de 2022 hasta el 1 de mayo- acumula un déficit del 28%.
En Santander-Parayas, se registraron 197 horas de sol, un 24% por encima del valor medio climatológico.
El viento, en el mismo observatorio, recorrió 8.578 kilómetros, prácticamente el valor medio esperado, aunque con una importante reducción de los vientos de componente oeste. Se registraron algunas rachas de viento superiores a 70 kilómetros por hora asociadas con el paso de las borrascas Mathis y Noa y al paso del frente el día 23.
También se registraron 33 descargas de rayos procedentes de tormenta concentradas el día 21.
La temperatura máxima más alta fueron los 30,3 grados que se registraron el día 28 en Cubillo de Ebro, y la mínima más baja, los -10,5 grados el día 5 en Nestares.
La máxima precipitación recogida en 24 horas fueron 23,2 litros por metro cuadrado el día 30 en Tresviso; y la racha máxima de viento alcanzó los 80 kilómetros por hora el día 1 en San Roque de Riomiera-El Caracol.
