Zapatillas de running: factores clave para elegir el mejor modelo

Elegir unas zapatillas de running adecuadas para ti es clave si quieres ofrecer tu mejor rendimiento en cada entrenamiento y progresar en tu nivel cuando llegue el momento de afrontar una carrera. Sin embargo, no es sencillo, ya que son muchos los factores a tener en cuenta para acertar. Aquí vamos a explicarte cuáles son los que bajo ningún concepto debes obviar.

SUPERFICIE

Es el primer aspecto que debes considerar al entrar en una tienda en línea como i-Run. Generalmente, se pueden distinguir dos tipos de zapatillas en este sentido: para asfalto y para trail running.

Las zapatillas para asfalto cuentan con suelas más blandas, puesto que están pensadas para correr sobre superficies duras. Esto hace que absorban mejor la energía de los impactos y que protejan mejor las articulaciones.

Sin embargo, no están preparadas para correr por senderos de campo, ya que esta característica podría hacer que las suelas se deterioraran rápidamente. Además, carecen de tacos y otros elementos que aportan mayor agarre sobre este tipo de senderos. Aspectos con los que sí cuentan las zapatillas de trail running.

DISTANCIA

No es lo mismo correr 5 kilómetros que un maratón (42 kilómetros, aproximadamente). Para una distancia corta puede servirte casi cualquier zapatilla, pero para una larga no. En el caso de que seas simplemente un aficionado que quiere correr distancias amplias, apuesta por zapatillas con un alto grado de amortiguación, aunque sea a costar de llevar un poco más de peso.

En cambio, si ya tienes cierto nivel y quieres batir tus marcas, puedes optar por modelos más ligeros. Estas zapatillas se conocen popularmente como “voladoras”.

TIPO DE PISADA

Para determinarla, es necesario que te sometas a un estudio de pisada. Es muy importante que lo hagas, ya que eso puede ahorrarte una lesión en el futuro.

La mayoría de los corredores aficionados compran zapatillas de running neutras sin pensar en las consecuencias. Sin embargo, tal vez necesiten unas zapatillas pronadoras (si el pie se vuelca hacia dentro al correr) o supinadoras (si lo hace hacia fuera).

Además, has de asegurarte de que las zapatillas de running te resultan cómodas y ofrecen un buen ajuste, lo que es clave para prevenir lesiones en los tobillos. También es importante que transpiren lo máximo posible, puesto que el sudor puede acabar generándote ampollas y rozaduras si corres muchos kilómetros. Si tienes todo esto en cuenta, estamos convencidos de que acertarás.