martes. 19.03.2024
La opinión de
José Ángel San Martín

José Ángel San Martín

Cantabria es la leche

Hay más de tres tiendas de chinos por cuadra. Es más fácil encontrar un trébol de cuatro hojas que una vaca paciendo en Liencres. El mercadillo de los jueves de Torrelavega vende más quesos que terneras la feria de los miércoles

Laredo y Lardero: no le des al niño en la cabeza

Georgie Dann (léase yóryidan) nos hacía bailar el bimbó mientras devorábamos las grasas saturadas de los pastelitos Bimbo. Y se atrevía a espetar un “mecagüen tó” para quejarse de la presencia de suegra, mujer e hijos en el chiringuito veraniego.

Los discursos de la princesuca

La princesuca arrastra un seseo adolescente, lee mejor que una párvula y peor que un bachiller y decora con brochazos del catalán y del inglés los relamidos párrafos cuya lectura le encargan.

Bares, qué hogares

Se equivocaron los tres de Gabinete Caligari. No hay como el calor del amor en un bar. Sería entonces, autoembriagados en los vapores etílicos de la movida madrileña.

Vital revitalizado

Este santanderino recriado en La Maruca nunca fue “Vitaluco”, sino el vital marino Vital. Incluso tierra adentro

La radio

Frente a los miedos de comunicación, los radiopredicadores y los voceros que crecen como hongos y mueren al anochecer, sobrevive con su eterna mala salud de hierro nuestra admirable radio.

Siente un afgano a su mesa

Los fieles colaboradores de Estados Unidos o España se han convertido en infieles colaboracionistas para ese grosero sultanato de los talibanes.

Nubes y sombras

Los laboratorios más prestigiosos del CSIC trabajan, sin éxito, en la averiguación de los ignotos conceptos que integran nuestra descomunal factura de la luz.

Tinta de verano

La tozuda realidad demuestra que las vidas son los ríos de tinta que van a dar al mar de la confusión. Sobre todo, las vidas de los otros, de los famosos.

De lobos, conejos y ratas

Algunos de ellos solo salen de su madriguera institucional para distribuir taimadamente raticida electoral.

Indulto e insulto

Sin llegar a lo soez ni alcanzar la inconveniencia de la calumnia, los adjetivos calificativos descalifican la intención del presidente de llegar a la inmunidad de rebaño del verano inmunizando también a los líderes del procés.

Partido a partido

Tuvo que llegar el Cholo a nuestras vidas para seducirnos con sus ojos mínimos, su sonrisa máxima y su gesticulación limítrofe con la convulsión.

El 7 M, el 9 M y el 15 M, sin “memes”

Ninguno de estos tres emes merece un solo “meme”. Porque arrojan y alojan en sí mismos una seria caricatura propia. Así que, como manda el maestro Sabina, seamos felices aunque sólo sea por joder.

Las esquelas y sus escalas

Las esquelas se atienen a la dolorosa sintaxis de “sobrinos, primos y demás familia” o al “su desconsolada esposa”, ya en vías de extinción. Son textos sin más pretextos que nos quieren poner en contexto familiar.

Pan (poco) y circo (mucho): Rociíto

En esta España de pan menguante y circo creciente, la hija de Rocío ha hecho definitivamente la más grande a la Jurado. Rociíto, incapaz de someter sus acusaciones al veredicto de un jurado ecuánime, podría haber jurado fidelidad eterna a la letra de su madre: “se nos rompió el amor de tanto usarlo”. Pero no, demasiado romántico para activar el sagrado talonario.

UGTT, ¿uge qué?

Los tiempos han cambiado: las borrascas se llaman ahora Ernesto y las centrales sindicales reclaman el TuTeo injertando la consonante lingual T en su centenario nombre.

Mamá, quiero ser youtuber

Un rubius vale por cien mil gabilondos. Un erupto de El Rubius comentando un videojuego vale más que cien sesudos videoblogs de Iñaki. El mundo al revés.

Panodrama

España son diecinueve vacunódromos, diecinueve carreras disparatadas por optimizar ese “culillo” de la sexta dosis. Diecinueve neurosis autonómicas y una sola pandemia. Panodrama.

Pico y pala: Gabilondo y Casado

Pablo Casado Blanco, como la nieve, salió a la calle para endilgarle una colleja a Sánchez. Ahora solo falta saber si acertó como los meteorólogos o echó una nueva palada de tierra sobre su carrera política.

Feliz Nadidad

El virulento virus se ha convertido en un implacable gendarme. Ordena y manda sobre nuestras alegrías, nos confina en la melancolía y nos inocula el miedo al presente y al futuro inmediato.

El allegado ha llegado

Sabemos que el allegado no es el cuñado ni el suegro ni el primo de Cuenca. Y suponemos que pueda ser el amante, la pareja o la costilla del familiar convocante de la cena.

El mundo tan enfermo y se muere Maradona

España planea la merienda-cena de la media docena. Salvo algunas autonomías que quieren elevar a 10 el número de comensales. Un homenaje, inconsciente, al más grande 10 de la historia del fútbol.

Sin vacuna contra la implementitis

Implementar es el verbo de moda. Desfila por las pasarelas del país sobre un ficticio tacón de aguja, luciendo una discutible costura sintáctica y un horrísono caminar.

El presidente delgado que se niega a flaquear

Sánchez se ha convertido en un antihéroe al rellenar silencios con palabrería mercadotécnica. El presidente delgado, solista de fin de semana, es menos brillante que Bunbury, pero también copia sus textos salpicados de pretextos.

Raza Nadal

La raza de Rafa no procede de extraños cruces, raros ensayos biogenéticos ni secretas técnicas de laboratorio. Rafael Nadal Parera, 34 años como 34 soles, nació alto, fuerte y rápido. Debió leer por algún lado el lema olímpico: “citius, altius, fortius”. Y se puso manos a la obra.

Madriz

Madriz no deja frío a nadie, ni siquiera el hielo del palacio que hace tan pocos meses almacenaba cientos de ataúdes.

Soy Messi, Leo poco

Leo Messi se llama Lionel Andrés Messi Cuccittini y tuvo que abandonar sus estudios en cuarto de la ESO Argentina. A diferencia del gran Gabriel García Márquez, que confesó irónicamente haber tenido que dejar su educación para entrar en la escuela, Messi cambió el rectángulo verde de la pizarra por el del césped. Salió ganando la afición y salió perdiendo Leo.