miércoles. 24.04.2024

¿40 años sin Paquita?

Parece que la democracia lo ha dejado estar, y en parte es culpa de todos, pero las huellas del monstruo franquista aún continúan muy vigentes en nuestra sociedad.

Este pasado viernes se cumplían 40 años de la muerte del dictador, de la muerte de Francisco Franco, o como le llamaba su padre, según publicó “Interviú” esta semana, “Paquita”.

Pero 40 años después, ¿qué queda de “Paquita”? Parece que la muerte del dictador queda lejana y algo ya pasado, pero no lo es tanto si realmente nos ponemos a analizar.

Por un lado, por la maldita guerra que empezó. España es según la ONU es el segundo país –tras Camboya- en número de desaparecidos que se encuentran en fosas comunes. En cifras más concretas, España tiene al menos 113.000 desaparecidos en fosas comunes, llegando a más de 200.000 desaparecidos, contando los que están en fosas comunes y sin localizar, como pueden ser los “niños robados del franquismo”.

Unas cifras que se vuelven aún más dolorosas si tenemos en cuenta que en los últimos doce años tan solo se han abierto 332 fosas.

El “sistema” económico que nos ha llevado a la crisis fue creado en el franquismo y propulsado en la democracia

Una situación que hace que miles de familias pidan los cadáveres de los suyos para poder cerrar las heridas. Una situación que es heredada del franquismo y que todos los gobiernos de la democracia han permitido, mientras “Paquita” continúa enterrada en su mausoleo que pagamos todos los españoles.

Si volvemos la vista hacia atrás parece que en muchas ciudades nos encontremos en los años 70 si revisamos el callejero. Ya que aún se mantienen plazas, calles, monumentos e “hijos predilectos”  de asesinos franquistas. De nuevo una situación heredada del franquismo y que la democracia aun no ha sabido resolver.

Por otro lado, “los Franco” aún siguen gozando de miles de millones y de edificios que no les pertenecen, sino que fueron “saqueados” al pueblo. Resulta que Franco no era tan austero como nos hacían creer y resulta que sí se lucraba masivamente de su puesto dictatorial. 400 millones de euros es la cifra que estiman los expertos que Franco ganó gracias a su entramado corrupto.

Por otro lado, el “sistema” económico que nos ha llevado a la crisis también fue creado en el franquismo y propulsado en la democracia. El “ladrillazo” empezó con los gobierno tecnócratas del Opus Dei en la dictadura y fue el mayor ejemplo de la “nueva España”, del “Spain is different”, que Fraga se empeñaba en “pregonar” por toda Europa.

Además, gente como Antonio González Pacheco, “Billy el Niño”, o Jesús Muñecas continúan impunes pese a sus crueles y sádicas torturas. Y por lo tanto, muertes como la de Enrique Ruano siguen sin esclarecerse y sin ser resueltas.

Por otro lado, a la muerte del dictador se inició una Transición que por mucho que se empeñen algunos con el tiempo se ha visto que fue una “chapuza”. En la Transición se cedió demasiado y ahora tenemos una bandera que media España no quiere, se olvidó demasiado y ahora no podemos juzgar a los torturadores, además del tema de las fosas. Creíamos que instaurábamos algo extraordinario y la separación de poderes brilla por su ausencia. Pensábamos que éramos una democracia moderna y olvidamos la participación ciudadana. Se puso a un rey para calmar a los monárquicos y ciertos sectores de la extrema derecha y ahora no sabemos qué hacer con su figura y con el dinero que consume. Pensábamos que estábamos cediendo todos y que era una transición pacífica, pero las cifras demuestran que fue sangrienta. Intentamos resolver los problemas identitarios con el “autonomía para todos” y ahora no sabemos cómo solucionar el “problema catalán”.

En definitiva, parece que la democracia lo ha dejado estar, y en parte es culpa de todos, pero las huellas del monstruo franquista aún continúan muy vigentes en nuestra sociedad. Analizarán conmigo que así es imposible cerrar las heridas.

¿40 años sin Paquita?
Comentarios