La Gerencia de Atención Primaria del Servicio Cántabro de Salud (SCS) ha difundido hoy entre los centros de salud el protocolo de gestión de las vacunas Covid sobrantes, en el que se aconseja tener previsto un listado de personas preseleccionadas de acuerdo con unos criterios para, en el caso de que sobraran dosis, garantizar su disponibilidad en el tiempo requerido.
Concretamente, el protocolo recoge que, antes de desechar una dosis, esta puede ser suministrada a algún paciente de la Zona Básica de Salud en la que se encuentre el centro, pero respetando siempre los grupos de prioridad establecidos en la estrategia de vacunación. Estos grupos son: residentes y personal sanitario y sociosanitario de residencias de mayores, personal de primera línea en el ámbito sanitario y sociosanitario, otros trabajadores de centros sanitarios y sociosanitarios, grandes dependientes no institucionalizados y personas mayores de 80 años.
El documento remitido a los centros de salud, siguiendo con lo establecido en la estrategia de vacunación marcada por el Ministerio de Sanidad y las disposiciones de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), sirve de "aclaración" al enviado el pasado día 8 de enero en relación a tener previsto dicho listado de personas preseleccionadas. Así lo ha informado en nota de prensa el Gobierno de Cantabria, que ha destacado que el objetivo es garantizar el uso adecuado de cada una de las dosis y evitar que se produzcan situaciones como la que ha llevado a la directora médica de Atención Primaria a presentar hoy su dimisión.
En relación con el tiempo de disponibilidad de las vacunas, el Ejecutivo ha explicado que la Pfizer BioNTech, por ejemplo, debe administrarse en las 6 horas siguientes a su reconstitución con el diluyente.
