Santoñeses ve con “preocupación” que el equipo de gobierno haya esperado hasta el 21 de agosto, casi al final de la temporada estival y con 21 casos activos de coronavirus en Santoña, para reaccionar ante una situación de la que el partido venía advirtiendo desde que empezó el verano. Así lo traslada Santoñeses en un comunicado, donde califican de “muy alarmante” su falta de anticipación ante los acontecimientos. “Santoña ha estado absolutamente abarrotada de gente desde principios de julio, una situación que entrañaba un potencial peligro de contagios. Mientras otros municipios de nuestro entorno, sin los problemas de escasez de efectivos de policía local que aquejan a Santoña, ya andaban pidiendo refuerzos a la delegación del gobierno nada más terminar el estado de alarma, aquí se ha esperado al día de ayer para dar ese paso”, denuncia el colectivo.
De la misma manera, Santoñeses enumera las numerosas propuestas que el partido hizo en aras de controlar el turismo y minimizar el riesgo de contagios por COVID y que, lamentan, “han caído en saco roto”. Entre ellas el rechazo a debatir de urgencia, en el pleno del 30 de junio, la moción para pedir a Puertos de Cantabria que tomara medidas en el faro del Caballo, un lugar que, según afirman, ha estado “absolutamente descontrolado durante todo el verano”. Así como las medidas para ordenar los accesos a las playas cuyas señalizaciones “no llegaron hasta bien avanzado julio”.
El partido político también ha expresado que “muchos santoñeses se han sentido desamparados, atónitos ante la falta de capacidad de supervisión para hacer cumplir las normas impuestas desde que acabara el estado de alarma” ya que, según afirman, la falta de control de las medidas de seguridad en calles, terrazas, playas o monte “ha sido la tónica habitual”.
Por último, denuncian la falta de comunicación del alcalde con el resto de partidos políticos. “Nos hemos enterado de lo decidido en la mesa de seguimiento del COVID-19 en Santoña a través de las redes sociales”, sentencian.
