martes. 19.03.2024

El centro de menores Carolina López Dóriga de Santander, reabierto el pasado 13 de junio, ha atendido a un total de 33 menores desde el inicio de la crisis sanitaria, manteniendo los siete programas que tiene en marcha durante todo el confinamiento.

Además, este espacio de intervención con menores en riesgo de exclusión ha adaptado en este periodo sus normas sanitarias y actividades a la crisis sanitaria y social del coronavirus, adecuando algunos de sus programas, como el Hestia, a la gestión emocional del confinamiento.

Así lo ha asegurado la alcaldesa Gema Igual, que ha visitado este miércoles el centro junto al concejal de Familia y Servicios Sociales, Álvaro Lavín, para comprobar las medidas desplegadas y agradecer al equipo de psicólogos y educadores el esfuerzo realizado desde el inicio de la pandemia. Igual ha destacado que este centro de menores retomó la atención presencial de los niños y adolescentes más vulnerables de Santander hace ya dos meses con todas las medidas sanitarias necesarias.

Cuando se decretó el estado de alarma, ha detallado, se analizó la adaptación del centro para mantener todas las actividades socioeducativas. Se analizaron las posibilidades y junto al equipo técnico se decidió dar continuidad a la atención a través de las herramientas telemáticas disponibles.

Durante todo el confinamiento, el centro mantuvo el apoyo telemático a los menores y sus familias para mitigar y contener las situaciones conflictivas y de riesgo, y apoyarles con atención psicológica y educativa en esta compleja situación.

Tal y como ha concretado la regidora, se reajustó la forma de trabajo y el equipo socioeducativo pudo continuar desarrollando todos los programas adaptados a los medios disponibles de los menores y sus familias, manteniendo -al menos- un contacto semanal con ellos.

Se llevó a cabo un seguimiento telefónico (una media de dos veces por semana) con los responsables familiares y los propios menores, interviniendo en aspectos como la psicoeducación, -con estrategias para afrontar el confinamiento de forma saludable-, apoyando emocionalmente a los menores y adultos cuidadores, y evaluando y mediando en situaciones de conflicto, siempre en coordinación con las Unidades de Trabajo Social (UTS) de la ciudad.

Desde mediados de marzo hasta hoy, ha informado la alcaldesa, se han desarrollado un total de 460 sesiones (177 con menores y 283 con los responsables familiares) y se han mantenido los programas de refuerzo escolar, desarrollo personal y social, las tutorías y el espacio familias, en colaboración con las UTS y los centros educativos.

En la fase 3 del confinamiento, concretamente el 13 de junio, se procedió a la reapertura del centro para la atención directa de los menores, en horario matinal, de 8:00 a 16:00 horas.

HESTIA

Igual se ha referido especialmente al programa de inteligencia emocional Hestia, que incluye ahora psicoeducación sobre estrategias para afrontar el aislamiento, apoyo emocional a los menores y los adultos cuidadores y mediación de conflictos familiares surgidos durante el confinamiento, por lo que es "el que más ha tenido que adaptarse" tras la crisis y "el más necesario ahora".

Así, ha explicado que ámbitos familiares como el de algunos de los menores usuarios del Carolina López Dóriga, con expedientes de preservación por riesgo de desprotección, han podido verse especialmente afectados por la reducción de ingresos por el cese de las actividades.

El centro cuenta con los programas fijos de desarrollo personal y social, tiempo libre y participación comunitaria, tutoría y hábitos de estudio. Como complementarios, están el Hestia, para mejorar las competencias personales y parentales en familias con menores en riesgo de desprotección; el programa de Transición a la Vida Adulta (para mayores de 15 años), y el programa Espacio Familia, basado en el concepto de 'Parentalidad Positiva'.

Y además de adaptar sus programas al coronavirus, también lo ha hecho con sus normas de seguridad, de modo que los usuarios llevan mascarilla en todo momento, realizan entradas y salidas escalonadas con tomas de temperatura, desinfectan los materiales y las diferentes salas, desarrollan actividades en grupos por separado y guardan la distancia de seguridad recomendada por las autoridades sanitarias.

CAROLINA LÓPEZ DÓRIGA

La alcaldesa ha recordado que este centro de día de menores es fruto de la solidaridad y la aportación desinteresada de una vecina de Santander, Carolina López Dóriga, que así lo dispuso en sus últimas voluntades.

El local, de la Fundación La Caridad, ha sido alquilado por el Ayuntamiento, que llevó a cabo las obras de rehabilitación y la tramitación de los permisos para su apertura como centro de atención a menores, y destina unos 100.000 euros anuales a este servicio.

El centro de menores Carolina López Dóriga atendió a 33 usuarios desde el inicio de la...
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