Los sindicatos recurrirán a la vía judicial tras el fin de las negociaciones con Digitex, al cerrarse este jueves por la mañana sin acuerdo el último encuentro con la compañía de 'contact center', cuya dirección anunció el traslado de toda la plantilla de Maliaño (Camargo) a centros de Jaén y Barcelona, una medida que afecta a 159 familias. Así lo ha informado a Europa Press la secretaria general de la Federación de Servicios de CCOO de Cantabria, Marta Careaga, que ha avanzado que, tras finalizar el periodo de consultas, los sindicatos irán al juzgado para demostrar que la medida es "totalmente desproporcionada y que sea un juez el que determine si esto es un despido colectivo, que es lo que creemos nosotros".
Quieren "que sea un juez el que determine si la movilidad que están plantando está proporcionada con las causas que ellos han aportado en el informe técnico, que está plagado de errores y hecho un poco a medida para presentar esta movilidad", ha explicado.
En este sentido, Careaga ha apuntado que si es un despido colectivo, "habrá que entrar en una negociación" del ERE colectivo lo que implica también las indemnizaciones de 20 días por año trabajado. Igualmente ha indicado que aún no se ha determinado si las demandas serán conjuntas o no.
Los trabajadores de Digitex-Konecta de Maliaño han llevado a cabo dos movilizaciones -incluida una huelga de 24 horas el pasado viernes- desde que la dirección anunciara un traslado de toda la plantilla a centros de Jaén y Barcelona. El comité de empresa explicó entonces que se trata de 159 familias, principalmente mujeres, que por conciliación familiar es "muy difícil moverlas" a otras comunidades autónomas como se plantea. Además apuntó que en muchos casos trabajan 25 o 30 horas semanales y "en ningún caso los salarios llegan al mínimo".
La compañía, integrada en el grupo internacional Konecta, anunció el pasado 20 de abril su intención de comenzar un expediente de traslado colectivo para toda la plantilla del centro de atención telefónica cántabro. La propuesta contempla que los trabajadores encargados de la venta telefónica de Naturgy sean trasladados al centro de La Carolina, en Jaén; y los de La Caixa y los responsables a Viladecans (Barcelona). Ante esta decisión, el comité de empresa convocó protestas, entre ellas una concentración en Santander el 27 de abril y una huelga y otra concentración el pasado viernes 5.
