Los sindicatos CCOO, UGT y STEC han convocado una nueva huelga general educativa para el 9 de marzo en todo el país a la que están llamados profesores, padres y alumnos en todos los niveles del sector, incluida la Universidad. Existen diferentes motivos para dicha convocatoria, todos ellos relacionados con la derogación de la LOMCE, aunque el principal es reclamar que el posible Pacto por la Educación que actualmente se está debatiendo en el Congreso de los Diputados se extienda a todos los agentes sociales, y no solo tenga un componente político.
A esto se añade la derogación del Real Decreto de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo, que conlleva, como ha explicado a este diario Jesús Aguayo, de STEC Torrelavega, “revertir los recortes” en recursos, profesores o financiación.
Asimismo, César de Cos, responsable de Enseñanza Pública en Cantabria, ha explicado que con la huelga se quiere ser “parte activa en la elaboración de una nueva ley educativa” tras la derogación de la LOMCE, otra de las reclamaciones que hacen los sindicatos, logrando así una “ley consensuada”.
Ambos representantes sindicales han coincidido en señalar que es necesario que el Estado aumente la financiación en el sector educativo después del recorte experimentado entre 2011 y 2016, del 12,64%. Actualmente España destina el 4,1% del PIB, cuando la media de la UE está en el 5%.
Entre otros puntos que se reclaman en la convocatoria del 9 de marzo destacan la “retirada del recurso de paralización de la LOMCE interpuesto por el Gobierno ante el Tribunal Constitucional”, el “mantenimiento de la jubilación voluntaria anticipada” y una “negociación colectiva de todos los aspectos que afecten al profesorado”.
Por otro lado, Aguayo ha reconocido que “tenemos auténtico pánico” de que el Pacto por la Educación que se debate en el Congreso “sea un engaño”, de ahí que la huelga se realice en marzo, mes en el que, en principio, se darán los pasos determinantes en la elaboración de dicho acuerdo.
