La Policía Local de Burjassot (Valencia) ha presentado una denuncia contra una vecina de la localidad que ha sido acusada de intentar acabar con la vida de su propio perro al obligarle a consumir antidepresivos.
El caso se ha descubierto gracias a los responsables de una clínica veterinaria, que se pusieron en contacto con la policía municipal después de que esta vecina de 55 años se presentara en las instalaciones sanitarias y confesara que había intentado matar a su mascota administrándole estos psicofármacos.
La mujer aseguró que estaba arrepentida de lo que había hecho minutos antes, cuando había suministrado estas pastillas al animal porque “me molestaba”. Inmediatamente el animal fue trasladado a un hospital veterinario donde fue ingresado. Los veterinarios pudieron salvar la vida del perro y la Sociedad Protectora de Animales de Burjassot se ha hará cargo del animal hasta que alguien quiera adoptarlo.
A la dueña de la mascota se le imputa un delito de maltrato animal y deberá declarar en el juzgado por los hechos que, en principio, ella misma ha confesado.
