El cántabro Álvaro González, jugador del Olympique de Marsella, recibió un impacto provocado por uno de los hinchas de su equipo que invadieron el centro de entrenamiento del equipo francés. Este altercado ocurrió por las protestas que de los aficionados del equipo marsellés contra la directiva. Finalmente, el partido que debía enfrentarles contra el Rennes la noche del pasado sábado fue aplazado.
Álvaro González, durante estos altercados, fue golpeado en la espalda por el objeto que lanzó uno de los ultras, pero no resultó herido. Por lo visto, el jugador lebaniego y capitán del club galo fue uno de los futbolistas que fue a dar la cara para tratar de calmar los ánimo de los hinchas, pero no sirvió de nada.
Al final fueron detenidos 25 ultras, de los 300 que atacaron violentamente contra los agentes que protegían el complejo deportivo. Entre los principales gritos, pedían la salida del presidente Henri Eyraud.
