De las grandes crisis surgen oportunidades de negocio o, al menos, opciones de desarrollar con más contundencia ideas ya existentes. Es lo que ocurre con las apuestas virtuales, una mezcolanza perfecta entre apuestas deportivas y juegos de casino que algunas casas de apuestas, listadas en el portal de información webapuestas.com, están afanándose en desarrollar para intentar suplir la ausencia de competiciones deportivas.
Las pérdidas en el sector son millonarias y es preciso invertir en nuevos ámbitos y diversificar la actividad hasta que la normalidad vuelva. Las altas expectativas que había previstas en el sector de las apuestas deportivas se han diluido con la crisis del coronavirus, por lo que el desarrollo de apuestas virtuales puede ser, no solo un bálsamo puntual, sino también una oportunidad de abrir un nuevo mercado en el sector.
Pero ¿a qué nos referimos cuando hablamos de apuestas virtuales? Son aquellas que se pueden realizar sobre eventos deportivos simulados virtualmente. Un potente software es capaz de simular competiciones deportivas sobre las que los usuarios de los sitios de apuestas pueden concurrir. El resultado se muestra a través de una animación en forma de gráficos. Cada competición deportiva virtual suele tener una duración de entre 3 y 5 minutos, lo cual incentiva la actividad apostadora. Fútbol, carreras de galgos, carreras de caballos, ciclismo en pista o carreras de motos son las disciplinas más habituales en este ámbito.
La gran ventaja para las páginas de apuestas es la inmediatez y flexibilidad que les aporta. Se puede apostar tanto antes del inicio de la competición como durante la misma y hay partidos 24 horas al día, los 7 días de la semana. El fútbol virtual es el que está más desarrollado, con posibilidad de hacer apuestas combinadas, oportunidad de doble juego, número de goles y todos los tipos de apuestas tradicionales y disponibles en el deporte real.
El problema es obviamente el nulo conocimiento de los apostantes o posibilidad de anticipar de alguna manera lo ocurrido y los riesgos de adición que pueden generar. Apostar virtualmente supone lanzar una moneda al aire ya que los resultados son generados aleatoriamente. El resultado sólo depende del azar como en los juegos de casinos y no sirven de nada las estadísticas ni el análisis previo de los equipos.
Esta modalidad de juego ha sido percibida por las casas de apuestas como una manera ideal de mantener su actividad a pesar del parón de las competiciones durante esta crisis pero habrá que estar muy atentos a la evolución de las apuestas virtuales en los próximos tiempos. Están teniendo muy buena acogida entre los jugadores y parece que han llegado para quedarse.
