La adjunta a la Secretaría General de la ONU, Virginia Gamba, ha alertado en Santander de que el niño expuesto "a los males de la guerra" es "el más vulnerable de todas las víctimas de las violencias", por lo que opina que vale la pena "adentrarnos y entender un mundo que quizás nunca tengamos que vivir, o esperamos no tener que hacerlo". Según informa la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en nota de prensa, la representante especial para la cuestión de los niños y los conflictos armados ha concretado que se encarga del estudio de un total de 16 situaciones que competen, además, al Consejo de Seguridad de la ONU, "lo que quiere decir que los países se encargan de revisarlas cotidianamente". Al tiempo que ha incidido en que en 2017 hubo en la República del Congo un pico "gravísimo" de violencia con una "guerra de niños contra niños" porque un grupo armado formado por menores de edad mataba a otros menores, ha recordado que hace 22 años la única vulneración que se reconocía en el ámbito de los menores era el reclutamiento y uso de estas personas. Sin embargo, Gamba ha destacado que se han agregado "cinco violaciones más que se consideran ataques graves contra niños en tiempos de guerra", concretamente el asesinato, mutilación y secuestro de niños, violencia sexual como resultado directo del conflicto armado, ataques a escuelas y hospitales, y negación de la asistencia humanitaria a los niños durante estos periodos.
"Hay problemas socioeconómicos graves, problemas culturales y en algunos casos odios en las familias de grupos étnicos"
Pese a todo, Gamba ha remarcado que cada asunto es una "situación única", por lo que su solución "no es tan sencilla", ya que, ha añadido, algunos estudios han demostrado que en la actualidad se dan casos de niños que, voluntariamente o vendidos por sus padres, tratan de unirse a los ejércitos o grupos armados para evitar su manutención. "Hay problemas socioeconómicos graves, hay problemas culturales y en algunos casos hay odios en las familias de grupos étnicos", ha lamentado. A este respecto, ha destacado que por estos motivos la guerra ha adquirido otra dimensión porque "ahora participan grupos que no tienen recursos o que quieren territorios ricos en recursos", en referencia a grupos "extremadamente violentos" como Boko Haram, Estado Islámico, Al-Nusra o los talibanes, que han posicionado "al niño en el medio, reclutándolos cada vez que pierden soldados en sus filas". Además, la representante de la ONU ha enfatizado en las niñas que sufren el reclutamiento para convertirse en esclavas sexuales. "Y a las que no están en edad de pubertad, cuando vuelven a casa corriendo las usan de bomba humana, usan el amor humano para atacar", ha apostillado. Otra de las vulneraciones de las que ha hablado Gamba, es la de atacar a las escuelas, lo que ha calificado como "algo típico en grupos terroristas", que tienen como objetivo eliminar los centros, amenazar a los padres para que no lleven a sus hijos al colegio o presionar a los profesores para que sean más radicales. Según ha expresado, se trata de una violencia para empoderarse porque "no hay mejor manera de tener a un pueblo subyugado que negar la educación".
Por todas estas vulneraciones, ha explicado que la oficina incluye presencia de monitores en los países para realizar un seguimiento de la situación y crear un informe para señalar a los culpables, "algo que solo realiza esta sección de la ONU". Esa lista, ha señalado Gamba, muestra los grupos armados que han cometido alguna de las seis violaciones mencionadas y actualmente hay ocho gobiernos a los que pertenecen 64 grupos armados: "No hacemos distinciones entre gobierno y grupos armados. Si violas los derechos de los niños, los has violado y ya está", ha zanjado. Ante las complicaciones de la reintegración de los niños afectados, Gamba ha admitido "pelearse" con los países que son miembros de la ONU porque es la defensora de los niños "y me tienen que oír". En su opinión, la ayuda que se ofrece debe ser mucho más larga, como un apoyo psicosocial durante toda su vida o hasta que no lo necesiten más, "no puede ser seis meses y adiós". Gamba ha defendido la idea de que "el niño es el presente, no el futuro" y en su opinión hay necesidad de ayuda porque "vemos muchos niños que se escapan por la situación y cuando lo hacen se encuentran solos", así como porque "el dolor que poseen los menores puede convertirse en una forma de cambiar la sociedad". "Tenemos que generar empatía para crear solidaridad, no ver a estos niños como un problema, sino como agentes de cambio", ha indicado.
Finalmente, respecto a la actual situación de las armas nucleares, la representante de la ONU ha mostrado preocupación porque "ha habido más proliferación nuclear que antes" y hay tres armas calificadas por la ONU como de destrucción masiva, una de ellas son las nucleares, y "están proliferando todas".
