sábado. 20.04.2024

El Banco Santander ha adquirido el 100% del capital social de Banco Popular por un euro y ampliará capital por aproximadamente 7.000 millones de euros que cubrirá capital y las provisiones requeridas para reforzar el balance de la entidad presidida por Emilio Saracho, cuya cotización ha sido suspendida. El Santander ha realizado dicha operación como resultado de un proceso competitivo de venta organizado en el marco de un esquema de resolución adoptado por la Junta Única de Resolución y ejecutado por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), según ha explicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En concreto, la adquisición del Popular, cuyas acciones cerraron este martes a un precio de 0,317 euros, con un descenso del 6,2%, se produce tras la subasta llevada a cabo por el Fondo Único de Resolución (FUR) y el FROB en la que el Santander fue seleccionada como entidad adjudicataria y paga un euro de valor simbólico. Como resultado, la resolución de Banco Popular se efectuará sin ayudas públicas.

El FROB dice que el objetivo de la venta es atajar los problemas derivados de la inviabilidad del Banco Popular

El objetivo de esta venta, según ha señalado el FROB en un comunicado, es atajar los problemas derivados de la inviabilidad del Banco Popular, garantizar la continuidad de las actividades desarrolladas por la entidad y proteger a los depositantes del Banco Popular. De esta forma, se garantiza "la completa seguridad" de los depositantes de Banco Popular y la continuidad ordinaria de sus operaciones que con carácter inmediato pasan a formar parte del Banco Santander.

La compra se produce después de que el BCE haya determinado que Banco Popular Español estaba en riesgo de caída por el "deterioro significativo" de su liquidez en los últimos días. De este modo, considera que la entidad, en un futuro próximo, habría sido incapaz de afrontar sus deudas y otros pasivos a medida que se acercara su vencimiento. Como parte de la operación, el Santander realizará una ampliación de capital de 7.000 millones, que está asegurada y en la que los actuales accionistas de la entidad presidida por Ana Botín tendrán derecho de suscripción preferente.

Botín: "El banco resultante de la integración fortalece la diversificación geográfica del grupo"

"Damos la bienvenida a los clientes de Banco Popular, que pasan a formar parte del Grupo Santander. Vamos a trabajar duro para ofrecerles el mejor servicio durante este periodo de transición y en el futuro. El banco resultante de la integración de Santander y Popular fortalece la diversificación geográfica del grupo en un momento de mejora del ciclo tanto en España como en Portugal, lo que nos permitirá cumplir con todos nuestros compromisos con clientes y accionistas", ha subrayado la presidenta del Santander, Ana Botín.

La integración de Banco Santander y Banco Popular reforzará "significativamente" las franquicias del grupo en España y en Portugal. En España, la entidad resultante, que operará con la marca Santander, se convertirá en el banco líder en créditos y depósitos, con 17 millones de clientes. Tendrá una cuota de mercado en crédito del 20% y una cuota del 25% en pymes, un segmento clave para el crecimiento de la economía española. Aumentar el negocio de pymes figura entre las prioridades estratégicas del grupo en España y la integración permitirá mejorar la diversificación de la cartera de negocio, con más peso en segmentos que aportan mayor rentabilidad en un momento positivo del ciclo económico, ha resaltado el Santander. La operación incluye también el negocio de Banco Popular en Portugal, que se integrará con Santander Totta. La transacción acelerará el crecimiento de Santander Totta y ampliará su cuota de mercado tanto en créditos como en depósitos, lo que reforzará la posición de la entidad como banco privado líder del país, con más de cuatro millones de clientes.

Está previsto que la operación genere un retorno sobre la inversión del 13%/14% en 2020 y un aumento del beneficio por acción en 2019. La entidad resultante aumentará su rentabilidad y generará sinergias de costes cercanas a los 500 millones de euros anuales a partir de 2020, con ratios de eficiencia entre los mejores del sector en España y Portugal, y un mayor potencial de crecimiento de ingresos.

El Santander hará 7.900 millones de euros de provisiones adicionales para activos improductivos.

El Santander ha destacado que la adquisición del Banco Popular cumple con los criterios estratégicos y financieros de inversión y se espera que refuerce los principales ratios de evolución del negocio del grupo. También está alineada con el compromiso del banco de hacer compras que complementen las franquicias en sus mercados principales cuando generen valor para sus clientes y accionistas. Para situar el nivel de provisiones y de capital del Banco Popular en línea con el resto del grupo, el Santander hará 7.900 millones de euros de provisiones adicionales para activos improductivos, incluidos 7.200 millones de euros para activos inmobiliarios. Ello llevará el nivel de cobertura del riesgo vinculado a la actividad inmobiliaria del 45% al 69%, "significativamente" por encima de la media del sector que es del 52%.

El grupo espera reducir los activos inmobiliarios del Banco Popular "significativamente", como ha hecho en el Banco Santander en los últimos años.

Tras estas operaciones, se espera que el impacto en el capital CET1 del grupo sea neutral y, a futuro, la transacción incrementará la capacidad del banco para generar capital orgánicamente. Santander mantiene su compromiso de aumentar su ratio de capital CET1 por encima del 11% en 2018.

El actual equipo directivo de Santander España, liderado por su consejero delegado, Rami Aboukhair, gestionará la entidad resultante de la integración.

Primer banco intervenido por la UE

La resolución del Banco Popular y su venta al Banco Santander ha sido la primera que se realiza bajo las normas de resolución de entidades bancarias de la Unión Europea, que se aprobaron tras la crisis financiera de 2008 con el objetivo de evitar los rescates con dinero público y que están vigentes desde enero de 2016.

La Junta Única de Resolución (JUR) ha anunciado este mismo miércoles en un comunicado la transferencia de "todas las acciones e instrumentos de capital" del Banco Popular al Santander de forma que la entidad "operará bajo condiciones normales de negocio como un miembro solvente y líquido del Grupo Santander con efecto inmediato". "La JUR y la autoridad nacional española de resolución (el FROB) han decidido que la venta va en el interés público dado que protege a todos los depositarios de Banco Popular y garantiza su estabilidad financiera", ha destacado la entidad presidida por la alemana Elke König. En concreto, el proceso se inicia cuando el Banco Central Europeo (BCE), encargado de la supervisión de entidades bancarias, notifica a la Junta Única de Resolución que un banco está en quiebra o en peligro de quiebra. En el caso del Popular, el BCE notificó a la JUR esta situación la noche del miércoles. "El deterioro significativo de la situación de liquidez del banco en los últimos días ha conducido a la determinación de que la entidad habría sido incapaz, en el futuro cercano, de pagar sus deudas y otras obligaciones", ha justificado en un comunicado la entidad presidida por Mario Draghi. Tras esta conclusión del BCE, la autoridad europea de resolución ha tomado el control de Banco Popular y, en un "proceso competitivo" ejecutado junto con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), ha seleccionado al Santander como entidad adjudicataria a cambio de un precio simbólico de un euro.

El Santander compra el Banco Popular por un euro