El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, considera “imprescindible” la ejecución de la variante entre Sierrapando y Barreda para poner fin a la “auténtica ratonera” que habitualmente se forma en el nudo de Torrelavega, en la confluencia entre la A-67 y la A-8, especialmente en épocas de mayor flujo de tráfico como el verano. Revilla, junto con el vicepresidente, Pablo Zuloaga, y el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha visitado hoy miércoles las obras de este proyecto que ya se encuentra ejecutado al 41% y cuya conclusión está prevista para finales de 2022.
“Es una gran noticia ver que la obra avanza a buen ritmo”, ha señalado el presidente, que opina que “lo que va a determinar la recuperación es invertir en infraestructuras” como esta que, además de solucionar un “problema histórico de atascos” en Cantabria, “genera empleo de forma inmediata y un valor añadido para toda la vida”.
El jefe del Ejecutivo cántabro ha dado la bienvenida a Ábalos y ha reconocido que su departamento “ahora está actuando de manera muy diligente” en los proyectos pendientes del Estado en Cantabria, entre ellos las conexiones ferroviarias con Madrid y con Bilbao, proyectos que están “en buen camino” y que mañana jueves abordará de forma exhaustiva con el ministro en el encuentro que ambos mantendrán, a las 10:30 horas, en la sede del Gobierno regional.
Por último, ha felicitado a las empresas constructoras (Vías y SIEC) y se ha mostrado optimista sobre el futuro de Cantabria: “Veo un futuro muy prometedor y, si el Ministerio de Fomento cumple, que estoy seguro de que lo va a hacer, con todas las inversiones programadas o las que, estando fuera, permiten llegar a Cantabria, hay que ser más optimistas aún”.
Por su parte, José Luis Ábalos ha destacado el “avance notable de esta gran actuación” que beneficiará no solo a Cantabria, sino también al conjunto de España, y que, según ha dicho, “está llamada a convertirse en un referente funcional de conectividad en la Cornisa Cantábrica y cruce de caminos de éxito entre las dos grandes vías de alta capacidad que atraviesan esta Comunidad Autónoma por sus cuatro puntos cardinales”.
Ábalos ha recordado las dificultades administrativas que presentaba el proyecto cuando llegó al Ministerio y ha subrayado que el compromiso del Gobierno de España con las conexiones viarias de Cantabria “empieza a ser una realidad”. Así, se ha referido a la mejora del Desfiladero de La Hermida, al ramal de acceso al Puerto de Santander, que espera poner en servicio “en la próxima primavera”, y a otras actuaciones viarias en las que, en total, se han invertido ya 163 millones de euros.
También han estado presentes en la visita la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones; el alcalde de Torrelavega, Javier López Estrada; varios diputados y senadores, otros miembros de la Corporación local y el jefe de la Demarcación de Carreteras del Estado en Cantabria, Fernando Hernández Alastuey, que ha sido el encargado de la explicación técnica.
INVERSIÓN
El proyecto supone una inversión cercana a los 120 millones de euros y permitirá solucionar los atascos que, en momentos de mayor flujo de tráfico, se producen en el nudo de Torrelavega, en la confluencia de la A-67 con la A-8.
Las obras se dividen en 4 grandes bloques. Los dos más importantes, por volumen de inversión, son el nuevo ramal de continuidad entre Barreda y Sierrapando, con una longitud de 2,95 kilómetros, y la remodelación del enlace que unirá Sierrapando y Polanco, a través de la denominada ‘Finca de los soldados’. Las otras dos actuaciones consisten en la mejora del acceso a Torrelavega desde la A-67, por el Pabellón de La Habana Vieja, y en la ejecución de enlace con el nuevo ramal desde Barreda.
