Si eres natural de Torrelavega, o de la Comarca del Besaya, en general, acostumbrarás a cruzarte con Óscar Freire -cuidado no confundirlo con su hermano, otro habitual de la bicicleta- por las carreteras torrelaveguenses. Su inconfundible maillot naranja del Rabobank con los ribetes de arcoíris en las mangas y un pedaleo potente, que incluso sufrirás para superar en coche, no engañan. Se trata del tres veces campeón mundial y triple ganador de la Milán-San Remo, la clásica de mayor prestigio en el calendario ciclista.
Retirado del ciclismo profesional en 2012, Óscar no elije cualquier ciudad de lujo por delante de su ‘tierruca’, donde disfruta de sus dos grandes pasiones: su familia y la bicicleta. En El Diario Cantabria hemos charlado con el sprinter para que nos recomiende varias rutas o sendas ciclistas para fundirte con la naturaleza y el deporte, en Cantabria, un domingo en familia.
Freire destacó el trabajo de diversos ayuntamientos de la comunidad por habilitar carriles bici donde practicar deporte, en familia, de forma segura y nos recomendó el que une Torrelavega con Suances, de aproximadamente 11 kilómetros, con un ancho de carretera de más de tres que desemboca en la ría de Suances, un espacio de gran belleza donde recargar energías tras el ejercicio. En esta línea, el torrelaveguense también añadió la Vía Verde del Valle del Pas, cuya extensión total cuenta con aproximadamente 34 kilómetros, aunque el punto más atractivo es el carril ciclable que discurre entre Puente Viesgo y Alceda. Unos 12 kilómetros perfectos para recorrer tanto en bicicleta, como andando, prácticamente sin desnivel, en una de las localidades más bonitas de Cantabria.
El tramo costero de San Vicente de la Barquera se convierte en una experiencia de nivel intermedio ideal para afrontar retos mayores
Por último, de cara a disfrutar del cicloturismo en MTB, en familia, o bien de forma individual, Freire remarcó la belleza del tramo costero de San Vicente de la Barquera. Si bien es una senda que exige un mínimo de condición física y no es el tramo ideal para niños muy pequeños, se convierte en una experiencia de nivel intermedio ideal para afrontar retos mayores. El tricampeón del mundo se quedó con la belleza de los parajes costeros y la posibilidad de alargar o acortar la ruta en función de nuestras características, puesto que podemos partir de San Vicente, recorrer toda la costa por la zona de Prellezo y Luey hasta exigirnos más de 40 kilómetros de pedaladas, o bien, dar media vuelta en el momento que sintamos que hemos llegado a nuestro límite.
El ciclismo español ha cosechado grandes éxitos en los campeonatos del mundo, tanto en ruta, como contra el crono, a lo largo de su historia. No solo el cántabro Óscar Freire, sino Alejandro Valverde, ‘Purito’ Rodríguez o Jonatan Castroviejo. Y en los campeonatos nacionales, son muchos los ciclistas cántabros que han llegado a lo más alto. Uno de los más laureados es José Iván Gutiérrez, cuatro veces Campeón de España en contrarreloj y dos veces en ruta. Gran deportista y gran persona, puesto que ha ayudado, sin ir más lejos, en el Real Racing Club, de forma altruista, con su experiencia en el deporte de élite. También hemos charlado con Iván para que comparta con nosotros sus escapadas preferidas, en este caso, a diferencia del enfoque familiar de Óscar Freire, orientadas a un nivel medio de exigencia.
La primera ruta recomendada por el contrarrelojista parte de Unquera para dar la vuelta a Pechón y desde ahí encarar la subida hacia Puentenansa. Una subida un tanto exigente pero enmarcada en un marco precioso desde el que se puede disfrutar del Valle de Lamasón y unas vistas únicas del Desfiladero de la Hermida. Para posteriormente descender el puerto y regresar a Unquera, donde siempre podemos degustar su producto típico, las corbatas, para recuperarnos del esfuerzo.
Si bien la zona del Valle de Lamasón, en la franja occidental de Cantabria, es un paraje de gran belleza; José Iván Gutiérrez tampoco se olvida del Valle del Asón, uno de los grandes olvidados de la ‘tierruca’. Allí, partiendo desde Arredondo, nos recomienda una ruta enmarcada en el Parque Natural Collados del Asón en la que destaca el descenso del Puerto de Los Tornos, situado en la frontera de Cantabria con Burgos. Dos experiencias un tanto más exigentes, destinadas a un ciclista aficionado que requiere de mayores retos, que entrena habitualmente y que ha de saber que se puede salir de los grandes puertos conocidos por el gran público, que hay vida más allá de Peña Cabarga y que Cantabria es un gran desconocido, incluso para los propios cántabros.
