Los ganaderos cántabros protagonizarán una marcha que tendrá lugar mañana a las 12:00 horas en la Plaza del Ayuntamiento de Santander, una acción que tiene como objetivo reivindicar un precio justo para la leche, de entre 34 y 36 céntimos por litro, que los ganaderos consideran mínimo para cubrir los costes de producción. Exigen al Gobierno y al Parlamento de Cantabria que legislen para dar una solución al sector lácteo de la región que, según denuncian, “se encuentra en grave peligro de extinción”.
Durante la concentración se repartirán 1.000 litros de leche como protesta, con el fin de concienciar a la población sobre la importancia que tienen los ganaderos para una comunidad autónoma que es mayoritariamente rural. Además, se instalará un stand donde se informará sobre las propuestas del sector lácteo para evitar su desaparición. De las 3.800 explotaciones de leche que había en 2001 en Cantabria, actualmente sólo quedan 1.500, y si la situación no varía todo apunta a que sólo podrán sobrevivir las grandes explotaciones.
Los productores lácteos aseguran que los ganaderos “no quieren limosnas ni subvenciones”, sino unas reglas de juego que garanticen la subsistencia del sector lácteo y que el Gobierno controle la entrada de leche de otros países que no cumplen la trazabilidad.
“No pueden más, se asfixian”, ha asegurado el presidente de ASAJA, quien ha explicado que desde la desaparición en abril del sistema de cuotas y la llegada del mercado libre, a los precios que no cubren los costes de producción se une la deslocalización de la producción porque a la industria “no le interesa ir a buscar la leche” a algunas zonas y está poniendo pegas a muchos ganaderos. Por ello, ha defendido la necesidad de que las industrias con implantación nacional se comprometan a recoger la leche de todos los ganaderos, además de garantizar un precio digno.
Además de éste y otros actos que se están llevando a cabo en nuestra región, los ganaderos cántabros se sumarán también a la “Marcha Blanca” final del 4 de septiembre en Madrid para reivindicar precios dignos a nivel estatal.
