viernes. 19.04.2024

La Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria (AEHC) ha denunciado la celebración de cotillones ilegales y ha alertado a los usuarios que se disponen a comprar invitaciones para fiestas de Fin de Año ante el peligro que éstos suponen al no existir garantías sobre la seguridad de los locales.

Los hosteleros han advertido en un comunicado de la proliferación de estos eventos en locales carentes de licencia o con licencia para distintas actividades. A su juicio, "esta falta de control puede traducirse en cualquier momento en graves accidentes que, por la gran afluencia de público, pueden revestir una seria gravedad".

Aunque los establecimientos no dedicados habitualmente a la hostelería están obligados a solicitar a sus ayuntamientos licencias para organizar los cotillones, la AEHC ha asegurado que "en muchos casos los organizadores se saltan este trámite celebrando estas fiestas de forma ilegal".

Desde la Asociación se ha incidido en que no se trata tan solo de defender el derecho a una competencia legal, impidiendo que actividades propias de hostelería las realice cualquiera, sino velar por los derechos a la salud e integridad de los consumidores y clientes.

"La falta de control absoluto sobre los locales donde se pretenden realizar, su falta de registro de aforo, materiales, entradas, salidas, productos que se sirven, elementos de consumo... pueden dar lugar a que se registren gravísimos incidentes y que, a posteriori, nadie asuma responsabilidades", ha apuntado la AEHC.

Por este motivo, el colectivo ha solicitado que se adopten con "la mayor urgencia posible" las medidas oportunas para que se prohíba cualquier acto, cotillón o similar en el que por grupos, peñas o particulares, se acometan actividades propias de hostelería sin cumplir con los requisitos y controles legalmente procedentes.

Asimismo, los hosteleros han enfatizado que los ayuntamientos tienen el deber de hacer un control previo sobre las fiestas ilegales, para proceder a su prohibición. Además, consideran fundamental que los consumidores estén informados de los establecimientos en los que se detecten irregularidades en cuanto a las condiciones de seguridad, calidad e higiene, así como que se hagan públicas las fiestas que se clausuren.

Los hosteleros denuncian la celebración de cotillones ilegales
Comentarios