Unos 180 agentes de la Guardia Civil desarrollarán en Cantabria la campaña especial de vigilancia y control de la seguridad de los vehículos de transporte escolar que la Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha este lunes y hasta el próximo viernes, 16 de diciembre.
Además, como es habitual además en este tipo de campañas, también se ha invitado a los municipios a sumarse a la misma, de modo que la vigilancia de este tipo de transporte se realice tanto en zona urbana como en interurbana. En Cantabria, donde más de 15.500 alumnos utilizan el transporte escolar, se ha invitado a participar a todos aquellos municipios que cuentan con Policía Local.
En España, cada día más de 600.000 escolares utilizan este tipo de transporte para desplazarse a sus centros educativos, en el que las tasas de accidentalidad son "mínimas", ha señalado la Delegación del Gobierno en nota de prensa.
Aún así, se quiere garantizar su seguridad y para ello, tanto los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil como las policías locales de aquellos municipios que decidan sumarse a la campaña intensificarán esta semana las inspecciones sobre estos vehículos, comprobando que las autorizaciones y documentos que deben tener son los correctos para la prestación del servicio.
Además, los agentes verificarán que las condiciones técnicas y los elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor.
El transporte escolar está sometido a una serie de normas como que, desde el 20 de octubre de 2007, los autobuses que se matriculan deben llevar obligatoriamente instalados sistemas de retención -cinturones- y, desde 2013, deben contar también con un sistema de frenado de emergencia que se active automáticamente cuando detecta la posibilidad de una colisión.
VELOCIDAD Y TELÉFONO MÓVIL
La velocidad inadecuada y las distracciones son las principales causas de los accidentes en los que están implicados este tipo de vehículos, por lo que se controlará especialmente que se circula a la velocidad permitida y que no se hace uso del teléfono móvil u otros aparatos que supongan distracción. También se realizarán controles de alcohol y otras drogas entre los conductores.
Además, se prestará especial atención al uso del cinturón de seguridad en aquellos autobuses escolares que los lleven instalados.
En el caso de Cantabria, 15.566 alumnos utilizan a diario alguna de las 510 rutas establecidas este curso, en las que desarrollan su servicio hasta 575 vehículos.
A finales del mes de enero de este año se llevó a cabo una campaña similar en la comunidad con el objetivo de concienciar a familias, conductores y a toda la comunidad educativa sobre la importancia de cumplimiento de las normas en este importante sector.
En aquella ocasión fueron controlados 141 vehículos, imponiéndose 65 denuncias, muchas de ellas por infracciones administrativas: carecer de seguro obligatorio o circular con la ITV caducada. No hubo ninguna denuncia por infracciones por alcohol y drogas.
