La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 44 años, con iniciales E.S.V., como presunto autor de un delito contra la salud pública cuando intentaba esconder hachís y cocaína en la cámara frigorífica de un bar de Muñorrodero-Val de San Vicente, del que era cliente y donde ya había sido detenido por el mismo motivo el pasado mes de marzo.
Se le intervinieron dos bellotas y tres trozos de hachís, dos envoltorios con cocaína y una báscula de precisión, que intentaba esconder. En la anterior detención en ese mismo bar, el 17 de marzo, se le encontraron oculto entre sus ropas hachís, cocaína y MDMA.
Según han informado este lunes fuentes de la Guardia Civil, sobre las 20:30 horas de pasado 12 de mayo, los agentes que realizaban una inspección en el citado establecimiento, dentro del Plan contra el consumo y tráfico de drogas en lugares de ocio, observaron a un hombre que introducía algo en una cámara frigorífica de la cocina, posiblemente al verse sorprendido.
El sospechoso era un cliente del bar conocido por los agentes, por lo que estos últimos fueron de inmediato a comprobar lo que había ocultado, encontrando unos 60 gramos de hachís distribuidos en 2 bellotas y tres trozos, 2 envoltorios de cocaína con un peso aproximado a los 6 gramos, y una báscula de precisión.
Igualmente se encontraron en su poder 190 euros en 10 billetes, por lo que se procedió a su detención como presunto autor de un delito contra la salud pública.
También se denunció al responsable del establecimiento, por supuestamente tolerar el tráfico de sustancias estupefacientes en el interior del establecimiento, o no ser diligente para impedirlo.
En la intervención realizada el pasado 17 de marzo en el mismo bar y en la que se detuvo a este mismo hombre, se intervinieron casi 300 gramos de hachís dividido en ocho tabletas y bellotas, del que se calcula podrían haberse obtenido unas 1.000 dosis; 8 gramos de cocaína y 1 gramo de MDMA (droga de síntesis más conocida como éxtasis).
Además, se denunció a otras dos personas por tenencia o consumo de sustancias estupefacientes en el interior del bar, interviniéndoles diferentes cantidades de cocaína, hachís y marihuana, así como a la persona que se encontraba al frente del establecimiento por tolerar el consumo o tráfico de estupefacientes en el establecimiento.
