Un total de 104.870 contribuyentes cántabros marcaron la X de la Iglesia católica en la declaración de la renta correspondiente al año 2016, lo que supone 3.903 menos que el ejercicio anterior. Así, del 39,25% de cántabros que marcaron la casilla de la Iglesia en la declaración de 2015 se ha descendido al 37,94%. Aun así, Cantabria sigue por encima de la media estatal, que es del 33,54%.
No obstante, la recaudación de la Diócesis de Santander subió un 1,3%, pues la recaudación del IRPF de 2016 a favor de la Iglesia católica se incrementó en Cantabria en 79.689 euros, hasta los 3,1 millones de euros, según los datos aportados este miércoles en rueda de prensa por el vicario episcopal para Asuntos Económicos, José Ramón Ocejo, el vicario general de la Diócesis, Sergio Llata, y el consejero de Asuntos Económicos, Javier Asín.
Ocejo ha destacado que en 2016 la Diócesis de Santander ingresó 6,23 millones de euros de aportaciones de los files, 3,4 millones de euros de asignación tributaria –superior a los 3,1 millones recaudados–; 977.654 euros de patrimonio y otras actividades, 2,36 millones de otros ingresos corrientes y 320.585 euros de venta de su patrimonio.
