La Audiencia de Cantabria ha condenado a casi trece años de cárcel -12 años y siete meses- a tres personas -dos hombres y una mujer- por un delito de robo con violencia en casa habitada y lesiones con arma peligrosa, por participar en la agresión a un hombre de Santander, a cuya vivienda entraron de madrugada para robarle, amenazándole e hiriéndole dos de ellos con un cuchillo y unas tijeras de cocina.
La sentencia, de la Sección Tercera rechaza los recursos de apelación de los tres denunciados, y confirma así un fallo previo del Juzgado de lo Penal número cuatro de Santander.
De acuerdo con la resolución judicial, los hechos ocurrieron en la madrugada del 2 de septiembre de 2015, hacia las 4.30 horas, cuando la acusada , V.R.V., y los dos acusados, R.J.K. y A.B.N., se dirigieron de común acuerdo y con el ánimo de enriquecerse al piso, ubicado en la calle Los Ciruelos, en el que residía la víctima junto a sus dos hijos, encontrándose también un amigo.
Tras llamar insistentemente al portero automático, los tres lograron acceder al interior del inmueble, y llamaron a continuación al timbre de la vivienda. Sus ocupantes entreabrieron la puerta, tratando de cerrarla a continuación al percatarse de la presencia de los acusados. Sin embargo, estos empujaron la puerta desde fuera y se produjo un forcejeo, en el que uno de los agresores alcanzó en el hombro al dueño con un cuchillo de 11 centímetros de largo que portaba.
Y mientras los hijos y el amigo se escondieron en las habitaciones y lograron después huir por la ventana, la acusada y uno de sus acompañantes esgrimió al propietario del piso unas tijeras de cocina y el citado cuchillo, respectivamente, para exigirle dinero. Ambos llegaron a clavarle varias veces en el cuerpo con los dos objetos.
A continuación, los agresores registraron la vivienda en busca de objetos de valor, y se apoderaron de tres teléfonos móviles. Y también prosiguieron agrediendo a la víctima con ambas armas, exigiéndole la entrega de dinero o bienes, llegando a quitarle el reloj de la muñeca, y hasta que llegaron al lugar agentes de la Policía Nacional.
Los efectivos detuvieron al tercer acusado, que trataba de huir por la escalera del edificio, y a los otros dos, que estaban aún dentro de la vivienda, y que trataron de impedir el acceso de los policías. Estos últimos están en prisión provisional desde los hechos, mientras que para el primero se le impuso, en la misma fecha, la prohibición de aproximarse a menos de 100 metros a la víctima y a los otros ocupantes de la vivienda.
A consecuencia de la agresión, el hombre sufrió varias heridas en el hemitórax, en la zona de la clavícula, tórax, brazo derecho, muslo izquierdo, así como un neumotórax, para lo que precisó tratamiento médico y quirúrgico. Necesitó quince días para sanar y como secuelas le quedaron diversas cicatrices. Durante los hechos, se produjeron desperfectos en la vivienda, tasados en 480 euros.
Por todo lo anterior, el juez condenó a los tres acusados a casi trece años de cárcel -seis años y siete meses a la chica, cuatro años y seis meses al otro agresor, y un año y medio para el tercero- así como a pagar una indemnización de 2.786 euros a la víctima.
