¿Qué estudios se ofrece en la Escuela de Arte Nº1?
Estamos especializados en dos familias, la de la Joyería y la de la Ilustración. El objetivo principal es proveer a los alumnos de una formación artística de calidad que les permita posteriormente desarrollarse de manera autónoma.
¿Cuál es el perfil del estudiante que se matricula?
Es muy variado. El primer año, en septiembre de 2008, empezamos con unos 20 alumnos y ahora estamos cerca de los 100. Tenemos gente de todas las edades. Por ejemplo, en el caso del grado medio de joyería el promedio de edad ronda los 40 años. Hay alumnos de 18 años que vienen desde el instituto y también gente mayor que quiere aprender y conocer un oficio nuevo para abrirse puertas en el mercado laboral. El caso de los grados superiores es diferente, porque es necesario tener bachilleres. Cada vez llegan alumnos con un nivel de conocimientos más alto. Desde arquitectas a licenciadas en Bellas Artes. Es curioso que en el caso de la joyería, un oficio al que tradicionalmente se han dedicado mucho más los hombres, tengamos un porcentaje altísimo de mujeres.
¿Cómo es el día a día en la Escuela?
Aquí las clases son muy intensas. Al tratarse de un edificio pequeño, nos vemos constantemente. Tenemos ratios de 20 alumnos y eso hace que los profesores no tengamos que mirar los libros para saber que notas tiene cada alumno. Ofrecemos mucha variedad de materias. Se tratan diez módulos distintos, que son muy dinámicos. Desde clases más teóricas como historia o informática a otras más prácticas en los talleres.
¿Cuáles son vuestras peticiones de cara al futuro?
Está claro que necesitamos más espacio, porque el edificio se nos ha quedado pequeño. Además, nos gustaría poder ofrecer alguna otra especialidad, para aumentar la oferta con la que contamos, sobretodo en el ámbito de la ilustración, donde se han creado nuevas especialidades como la del cómic o la de diseño interactivo. Estas necesidades se las hemos manifestado a las diferentes administraciones. En estos momentos tenemos una gran colaboración con el nuevo Ayuntamiento de Reocín, con el que queremos establecer una serie de convenios.
¿Consideras que dentro de la formación, se da suficiente importancia a las artes?
Creo que ni las administraciones ni el sector privado se han planteado su importancia. Consiste en tener un conocimiento anterior sobre de donde vienen las Escuelas de Arte. Nacen en la Revolución Industrial para que no se perdiesen los conocimientos de los artesanos, y se acomodasen a los nuevos métodos de producción. Por ejemplo, en ilustración nuestros alumnos se siguen manchando las manos de tinta, pero también se trabaja en la informatización. Tenemos la necesidad de que se vea como un sector económico, no algo que simplemente sirve para adornar.
