Cantabria registró en los tres primeros meses de este año 1.548 accidentes laborales con baja, lo que supone un repunte del 10,2 por ciento con respecto al mismo periodo de 2016, según datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo, publicados en el Instituto Cántabro de Estadística (Icane) y recogidos por Europa Press.
Este número de accidentes laborales es el más alto de un primer trimestre del año desde 2011, cuando se contabilizaron 1.714.
El incremento de la siniestralidad se observa en el caso de los accidentes mortales, ya que de enero a marzo fallecieron tres trabajadores en la región frente a una sola muerte registrada en el mismo periodo de 2016, lo que supone un aumento del 200%.
También repuntaron los accidentes leves, con 1.530 siniestros, 142 más que en el primer trimestre del pasado año, lo que implica un crecimiento del 10,3 por ciento.
De enero a marzo fallecieron tres trabajadores en la región frente a una sola muerte registrada en el mismo periodo de 2016
Por su parte, los accidentes graves se mantuvieron en las mismas cifras de los tres primeros meses de 2016, es decir, 15 casos.
Casi el 85% de los accidentes de trabajo en el primer trimestre de este año se produjeron durante la jornada laboral, 1.314, que son 96 más que los registrados en jornada en el mismo periodo del año anterior.
Los accidentes in itinere ascendieron a 234, que son 48 más que los que tuvieron lugar de enero a marzo de 2016.
Del total de accidentes laborales, el 65% (1.012) implicaron a hombres y el 45% restante a mujeres (536). En este sentido, los accidentes de varones han crecido interanualmente un 14,3% frente al 3,2% que han aumentado los de mujeres.
Sectores
Por sectores, el mayor número de accidentes en el primer trimestre se concentró en la industria manufacturera, con 294 (un 27% más que en el mismo periodo de 2016), seguida de administración pública y defensa con 181 (un 48% más), comercio y reparación de vehículos a motor con 178 (una reducción del 13,6% respecto a los casos del año anterior), y construcción con 170 (un 16,4% más).
Los fallecidos pertenecían a tres sectores diferentes como son la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca; la industria manufacturera; y el transporte y almacenamiento.
Los accidentes graves se concentraron en agricultura, ganadería, silvicultura y pesca (cuatro); transporte y almacenamiento (tres); e información y comunicaciones (dos), mientras que el resto de sectores afectados solo registraron un caso (industrias extractivas, industria manufacturera, suministro de agua, saneamiento y residuos, actividades administrativas y servicios auxiliares, administración pública y defensa, y actividades en los hogares).
Los accidentes leves fueron más numerosos en la industria manufacturera (292), administración pública y defensa (180), comercio y reparación de vehículos (178) y construcción (170).
