Astillero ha estrenado un nuevo recinto de esparcimiento canino en el extremo noroeste del parque de La Cantábrica, un parque con el que el Ayuntamiento da respuesta a los propietarios de perros que reclamaban un espacio donde poder socializar con sus mascotas.
La concejala de Obras y Medio Ambiente, la regionalista Maica Melgar, que ha comprobado hoy jueves los últimos trabajos de limpieza y preparación de este espacio, ha celebrado que por fin este nuevo parque de perros esté ya a disposición de los usuarios. Y es que la puesta en servicio de este parque canino se ha demorado al incorporar algunas mejoras sobre el proyecto inicial requeridas por los propietarios de perros que lo van a utilizar.
"Una vez llegamos a la Concejalía de Medio Ambiente y asumimos la responsabilidad de ejecutar el proyecto, hemos intentando dar respuesta a todas las demandas y necesidades que nos trasmitían los potenciales usuarios, para optimizar esta infraestructura", que primaba la "socialización" de propietarios y perros, sobre el ejercicio físico de las mascotas, ha señalado Melgar.
Aunque esta instalación "no responde en su totalidad" a lo que el equipo de gobierno regionalista considera "óptimo" para el esparcimiento y ejercicio de los canes, confía en que pronto se encuentre otro espacio donde habilitar un parque de dimensiones más amplias donde "puedan disfrutar en libertad el mayor número posible de perros". Mientras, se han incorporado peticiones, ha detallado la concejala, como el cambio del cerramiento previsto de hilo de cemento, "malla conejera" y tablas horizontales, por otro "más seguro y que evite lesiones y escapes" de los perros, o la eliminación de los elementos de ejercicio que, según trasmitían los dueños de canes, dado el tamaño del recinto, no servirían a ese fin y restarían espacio para el esparcimiento de los animales.
El mismo motivo ha llevado a no colocar las "mesas tipo canadiense" previstas, entendiendo que no se trata de una zona de picnic y que restarían espacio a los animales. En su lugar se han instalado una serie de bancos de hormigón donde los propietarios podrán descansar y socializar mientras sus perros disfrutan de un espacio sin correas.
El parque para perros dispone además de una fuente, se ha añadido un sistema de drenaje para los orines que garantice la limpieza y salubridad del espacio, e iluminación para que pueda ser utilizado con independencia de la luz del día. Melgar confía en que las mejoras introducidas, aunque hayan podido demorar un poco la puesta en marcha del parque para perros, respondan a las necesidades solicitadas por los usuarios.
